viernes, 29 de julio de 2011

Un Europeo sub 19 poco común

Este Europeo sub 19 que se está disputando este mes en Rumanía es un poco peculiar. Peculiar porque hay muchas de las grandes selecciones potentes (Alemania, Holanda, Portugal, Italia, Francia o Inglaterra) que no están presentes y esto hace que España sea la selección más habituada a jugar estos torneos. Pero si estas selecciones se quedaron fuera, fue porque otra fue capaz de eliminarlas antes en una siempre dura Ronda Élite.

Ya pasada la fase de grupos, ya han caído la mitad de los equipos. Ya está eliminada la anfitriona, Rumanía, incapaz de ganar ningún partido, como Bélgica, ambas últimas de sus respectivos grupos. Después están Grecia y Turquía, selecciones que perdieron el partido clave de la fase de grupos contra la que ha acabado siendo la segunda de su grupo, Irlanda y Serbia respectivamente. Ambas selecciones demostraron cositas, detallitos, algún buen jugador, sobre todo Fortounis en Grecia, pero el rendimiento tampoco ha sido el esperado tras haber sido capaces de eliminar a Francia y Alemania en la Ronda Élite.

Pero pasemos a hablar de las selecciones que todavía siguen en el torneo. La primera semifinal, de las 17:45, enfrenta a la República Checa con Serbia. A Serbia la vimos poco por Eurosport y en ese partido (contra España, perdió por 0-4) no demostró ninguna de sus virtudes. Estuvo floja atrás, perdió muchos balones en el centro del campo y casi no creó ocasiones de gol. No apareció su teóricamente mejor jugador (Lukic) y tampoco aparecieron sus compañeros en ese partido. Así que hoy veremos realmente su potencial.
Su rival, la República Checa, tampoco da la sensación de haber mostrado todo su potencial. Durante la fase de grupos, pese a tener que remontar dos de sus tres partidos, siempre dio la sensación de poder haber hecho algo más, de que Prikryl aparecía lo justo para desequilibrar cada partido, pero sin pasarse. Que Kaderabek medía sus incorporaciones por la banda y sus conducciones, que, en líneas generales, está selección podía jugar mejor pese a pasar cómodamente como primera de grupo. Esta tarde espero ver la mejor versión de ambas selecciones, que lucharán por estar en la final de este Europeo sub 19, oportunidad que han tenido en muy pocas ocasiones en su historia.

En la otra semifinal (19:45) se enfrentarán España e Irlanda. La selección irlandesa - hay que recordar que golearon a Italia por 3-0 en el partido clave de la Ronda Élite, por eso están en este Europeo - es un equipo con un buen toque de balón, con jugadores bastante buenos técnicamente, sobre todo en las bandas (especialmente Forde) y en el centro del campo (O'Sullivan, Carruthers y Hendrick). Es una buena generación que tiene una idea clara de juego. Irlanda juega con un 4-3-3: una defensa sólida, buena en el juego aéreo y peligrosa a balón parado; un centro del campo que mueve bastante bien el balón y que es capaz de conducir rápidas transiciones y una delantera con dos extremos bastante buenos y un delantero referencia que baja bastante a recibir balones. Es una buena selección con la que la selección española tiene que ir con cuidado.
Pese a ello, España es la gran favorita. Tanto de la semifinal como del torneo. Tiene a grandes jugadores, varios de ellos ya camino a consagrarse en Primera o en Segunda la próxima temporada y pese a que haya un montón de ausencias respecto a la "Selección ideal del 92", por culpa de que los mejores están con la selección para el Mundial sub 20, esta selección tiene un gran nivel. Lo vimos en los dos primeros partidos y vimos en el tercero justamente lo que no hay que hacer. Si España consigue jugar al nivel de los dos primeros partidos, con Deulofeu incisivo por la banda derecha, Sarabia haciendo pases de gol partiendo desde una posición más centrada, Morata enchufado, Rubén Pardo distribuyendo con critero y una defensa sólida, España debería estar en la final compitiendo contra la República Checa, aparentemente inferior, pero que todavía nos puede sorprender en lo que queda de torneo.

martes, 26 de julio de 2011

La decadencia escocesa

Julio de 2009, Edimburgo. Para matar esos ratos muertos de espera, que se repiten casi jornada tras jornada de un modo u otro, uno coge uno de los diversos periódicos de la casa. Empezando la lectura de atrás hacia adelante - como de costumbre, lamentable manía, quizás - uno ve que la prensa hace un montón de juegos de palabras con el precio que ha pagado el Celtic de Glasgow por Fortuné, que ocupa gran parte de los titulares de la sección de deportes.
Entre esas noticias de fútbol, uno se encuentra con los resultados de las rondas previas de la Europa League en las que el Falkrik sólo es capaz de vencer al Vaduz FC por 1-0 o se sorprende con un Motherwell que cae por 1-0 en el campo de un desconocido equipo llamado Flamurtari Vlorë, de Albania. Luego, unos días más tarde, uno se entera que el Motherwell ha remontado (ganando por 8-1 en la vuelta) y ha pasado ronda, mientras que el Falkirk fue eliminado. Sorprendente lo del Falkirk, pero uno se sorprende todavía más cuando se entera de que en la siguiente ronda el Steaua de Bucarest le clava un 6-1 de global al Motherwell o cuando ve que el Aberdeen cae estrepitosamente contra el Sigma Olomuc checo por un 8-1 global (1-5 en el partido de ida en Escocia).

Más tarde el Celtic cae en la ronda previa de la Champions League contra el Arsenal y el Rangers es incapaz de superar a un inexperto Unirea Urziceni en la fase de grupos de la Europa League. Si a esto se le añade el fracaso del Celtic en su grupo de la Europa League, quedando por detrás de Hapoel Tel Aviv y Hamburg, uno se empieza a preocupar. Los dos grandes escoceses, cada vez más venidos a menos, ya no dan miedo ni en su propio campo. Fracaso colectivo del fútbol escocés en Europa en la temporada 2009-10.

Un año más tarde, en la temporada 2010-11, el Celtic cae estrepitosamente en Braga por 3-0 en su primera ronda previa de la Champions League. No puede remontar y tiene una nueva oportunidad para hacer algo en la Europa League, concretamente contra el Utrecht, que le gana por un contundente 4-0 en Holanda en el partido de ida de su eliminatoria. Evidentemente, el Celtic no puede remontar y, además, al ya eliminado Hibernian se le suman el Dundee United y el Motherwell, eliminaciones más comprensibles en esa ronda. En la Champions el Rangers consigue hacer una mejor fase de grupos y es tercero por detrás de Manchester United y Valencia. Luego elimina al Sporting de Portugal en la Europa League y cae en octavos contra el PSV, resultado algo más decente y coherente para lo que son las aspiraciones del conjunto protestante.

Poco a poco el nivel del fútbol escocés en Europa va decayendo. Ya no van dos equipos a la Champions League, sino que sólo va el campeón de liga y tiene que pasar por dos rondas previas del Camino de los Campeones. El Rangers, campeón de liga, se tiene que enfrentar al Malmö. No es el rival más fácil, pero son superiores al equipo sueco. La semana anterior había caído el Dundee United en la Europa League, siendo ya el primer equipo escocés en jugar competición europea y el primer eliminado, en este caso contra Slask Wroclaw de Polonia. Algo inesperado. En la siguiente ronda el Hearts juega contra el Paks húngaro, un rival teóricamente asequible. También lo era el Malmö, pero esta noche ha dado la sorpresa ganando al Rangers en Ibrox por 0-1. Un resultado negativo, muy negativo, pero no irremontable. Pero, una vez más, el fútbol escocés ha quedado en evidencia.

No hace tanto tiempo, el Rangers jugó una final de la UEFA. Concretamente en el año 2008, cuando perdió por 2-0 contra el Zenit de San Petersburgo. 5 años antes, en 2003, el Porto ganaba su primera Copa de la UEFA contra el Celtic de Glasgow. Ése fue el primer título europeo de Mourinho, el que precedió al triunfo del equipo portugués en la Champions del año 2004. Pero el Porto necesitó la prórroga para derrotar a un combativo Celtic por dos goles a tres en Sevilla. No hace tanto tiempo, el Celtic y el Rangers eran dos equipos que llegaban de manera más o menos regular a los octavos de la Champions League o a rondas bastante avanzadas de la UEFA. Y ahora, no tanto tiempo después de todo aquello, estos equipos tienen serias dificultades para clasificarse para la fase de grupos de la Champions o pasar los grupos de la Europa League. El año que viene sí que tendrán, de nuevo, dos plazas potenciales para estar en la fase de grupos de la Champions League, pero si se descuidan las volverán a perder.
El fútbol escocés cada vez está peor y pese a que todavía continúa el dominio de Celtic y Rangers por encima de todos los demás equipos escoceses, el nivel de los dos grandes es cada vez menor. Y su superioridad, similar. Esto evidencia los males de un fútbol escocés que poco a poco va perdiendo a sus estrellas sin conseguir ocupar su lugar. Va perdiendo competitividad y en Europa es donde más lo nota. Y además, el deseo de ver a un Motherwell, un Aberdeen o un Hearts en la fase de grupos de la Europa League es cada vez más grande y, al mismo tiempo, más improbable.

lunes, 25 de julio de 2011

Un final esperado en un torneo imprevisible

Prácticamente 24 horas después del inicio de la final de la Copa América toca reflexionar sobre lo visto anoche. Quizás son 24 horas para analizar con mayor perspectiva lo visto ayer o porque no pude escribir antes. De todos modos, Uruguay se hizo meritoriamente con el triunfo en la final ante una selección paraguaya que no supo anular el juego charrúa y tampoco fue capaz de generar grandes ocasiones de gol.

Uruguay fue de menos a más a lo largo del torneo. Hizo una fase de grupos bastante discreta pero correcta, empatando contra Perú y Chile en sus dos primeros partido y ganando por 1-0 a México en el último partido. Luego demostró que podía competirle de tú a tú a Argentina, pese a jugar unos 80 minutos con diez jugadores -50 de ellos con uno menos que la selección albiceleste- y marcó los cinco penaltis de una emocionante tanda. Contra Perú era favorita y demostró su superioridad y contra Paraguay su superioridad se acentuó en un magnífico partido para cerrar un torneo memorable.

Probablemente este éxito de Uruguay no se habría producido sin tener a jugadores capaces de dominar ambas áreas. Con un Muslera genial en esta Copa América -sobre todo en el partido de cuartos de final contra Argentina- y con una pareja de centrales muy sólida, formada por Coates y Lugano, la defensa de Uruguay se convirtió en una defensa bastante sólida, acompañada por el buen trabajo del equipo, sobre todo de los laterales y mediocentros defensivos. Si bien es cierto que contra Argentina la defensa uruguaya sufrió más, en el resto de partidos fue bastante sólida.

En el otro área estuvieron los que seguramente fueron los dos mejores jugadores del torneo: Forlán y Suárez. El primero, jugador del Atlético de Madrid, no tuvo un torneo fácil. No hizo una temporada brillante con el Atlético y con Uruguay le costó encontrar el gol. No marcó hasta la final, pero esto no debe empañar su gran trabajo y rendimiento. Un delantero es mucho más que el gol: es también las ocasiones de gol que genera y el trabajo defensivo que realiza. Y en esto Diego Forlán destacó.
Quizás algo menos que Luis Suárez, que fue el mejor en la semifinal contra Perú y abrió el camino a la gloria en la final con un soberbio recorte a Verón en el primer gol de partido. También cerró el torneo uruguayo con una asistencia de cabeza espléndida a Forlán prácticamente en el último minuto de partido. Pero Suárez no fue sólo su actuación en esos dos partidos. También fue un jugador peligrosísimo, que caía a ambos costados en busca del balón, provocando faltas que acababan en jugadas de peligro o intentando robar balones a los defensas. Fue una pesadilla para las defensas rivales. Eos demuestra que el trabajo de Suárez también fue muy bueno y por eso, además de sus goles, fue escogido mejor jugador de la Copa América.

Y si hablamos de Uruguay, también hay que hablar de Maxi y Álvaro Pereira, dos jugadores destacados por su labor tanto en ataque como en defensa. Ellos eran los que unían las dos áreas, los que llevaban el balón a la zona de ataque en una selección sin un gran centro del campo para retener el balón. Su aportación en ataque, y también en defensa, fue clave para el éxito uruguayo.

Más allá de la buena labor de Uruguay, también hay que destacar la decepcionante actuación de Paraguay en la final. Gerardo Martino empezó ya con una alineación bastante extraña, sacrificando a Estigarribia y Barreto y apostando por Zeballos, un jugador que prácticamente no había jugado en esta Copa América, en el lugar de Barrios. Apuestas controvertidas y poco acertadas que no ayudaron a un equipo que apenas creó ocasiones a lo largo del partido. Al final, en un torneo que ha estado lleno de sorpresas, tuvimos una final en la que el favorito ganó con comodidad. Quizás no esperábamos que ganara con tanta facilidad, pero creo que Uruguay era la favorita desde que se conocieron los cuatro semifinalistas.

Para cerrar ya este torneo, hay que hacer la alineación ideal del torneo, que para mí sería un 4-3-1-2 y estaría formada por Villar en la portería, Maxi Pereira, Lugano, Vizcarrondo y Álvaro Pereira en defensa, Carlos Sánchez, Vargas y Rincón en el centro del campo con Forlán como mediapunta y luego Paolo Guerrero y Luis Suárez en la delantera. Sé que Álvaro Pereira apenas jugó de lateral zurdo, pero había que encajar de algún modo en la alineación a Álvaro Pereira y Vargas. Otros como Muslera, Waldo Ponce, Cíchero, Leo Messi, Arévalo Ríos, Rondón o Estigarribia podrían estar en este once ideal, pero sólo caben once y hay que acabar escogiendo. Y, puestos a escoger, Luis Suárez ha sido, en mi opinión, el mejor jugador de esta Copa América de 2011.

jueves, 21 de julio de 2011

Los cinco empates de Martino

Paraguay jugará el próximo domingo la final de la Copa América contra Uruguay. El equipo de Gerardo Martino llega a la final sin haber ganado ningún partido en todo el torneo, aunque tampoco ha perdido ninguno. En los cinco partidos que ha jugado -únicamente contra tres rivales distintos: Ecuador, Brasil y Venezuela -, ha sido incapaz de ganar tras los primeros noventa minutos. También ha sido incapaz de ganar en los treinta minutos de prórroga de los cuartos de final y las semifinales, rondas en las que ni siquiera consiguió marcar.

Este balance puede hacer que el nivel de Paraguay parezca muy pobre. El balance no es demasiado bueno, pero el equipo funciona relativamente bien. Ha dejado la portería a cero en tres partidos - en los que tampoco consiguió marcar, evidentemente -, y los otros dos partidos en que marcó varios goles los tiró en los últimos minutos, ya que tanto Brasil como Venezuela (en la fase de grupo) consiguieron marcarle el gol del empate a Paraguay al final del partido. No hay que olvidar que en ambos partidos Paraguay empezó perdiendo.

En cuartos de final y en semifinales, Paraguay no ha generado demasiado fútbol. Tampoco generó ocasiones y pudo perder ambos partidos ante rivales que crearon más peligro y fueron mejores. Pero Paraguay aguantó, gracias a Justo Villar en cuartos de final y gracias a los postes en las semifinales. Consiguió minimizar las ocasiones de sus rivales que, pese a ello, pudieron haber ganado sus partidos de haber entrado alguna de sus ocasiones más claras.

Sin embargo, también hay que criticar el poco nivel de Paraguay en ataque durante el torneo. Cinco goles, varios de ellos a balón parado. Un gol por partido. Uruguay sólo ha marcado un gol más, pero las sensaciones son muy distintas. Salvo el partido de Brasil, y ratos contra Venezuela en la fase de grupos, les costó demasiado generar ocasiones. Ortigoza y Estigarribia parecen los únicos jugadores capaces de crear algo de fútbol. Luego están Barreto y Valdez que también luchan por su cuenta, pero sin demasiada fortuna. Aunque un disparo lejano del primero o un buen desmarque del segundo pueden resultar mortales, no hemos visto tampoco grandes partidos suyos. Roque Santa Cruz está en un mal estado de forma y está siendo azotado por las lesiones mientras que Barrios tiene pocas ocasiones para marcar goles, aunque siempre está ahí para poder empujar alguna.

Por eso, cuando le preguntan a Justo Villar tras el partido, el portero paraguayo dice que tienen que mejorar. Tienen que mejorar muchas cosas para poder ganarle a Uruguay, una selección que domina ambas áreas, que tiene unas individualidades capaces de ganar un partido en cualquier momento y que cada vez está mejor. Paraguay ya hace cosas bien, sobre todo en fase defensiva. Paulo Da Silva y Darío Verón están cuajando un buen torneo en defensa, Estigarribia está siendo una de las apariciones del torneo y Haedo Valdez se entrega al máximo, luchando por su cuenta para enojar las defensas contrarias. Pero a Paraguay le falta crear más a menudo ocasiones de gol y jugar mejor con el balón en sus pies. Tiene un par de días para mejorar y encarar su primera final desde 1979, la octava de su historia. Uruguay es favorita, pero este papel ya le viene bien a Paraguay. Veremos si vuelven a llegar a la prórroga, empatando por sexta y última vez en el torneo.

lunes, 18 de julio de 2011

Sorprendentes decepciones

Dos empates en la fase de grupos acompañados de una victoria en la última jornada ante uno de los rivales más débiles al que ganaron bastante cómodamente por tres goles de diferencia. Luego, ante un equipo que también estuvo en los cuartos de final del pasado Mundial de Sudáfrica no consiguen ganar en los 90 minutos y necesitan la prórroga por culpa de la actuación estelar del guardameta rival. Y también la tanda de penaltis, con la que quedan eliminados de la Copa América.

Esta descripción corresponde, al mismo tiempo, a las selecciones de Brasil y de Argentina. Las dos grandes decepciones de la Copa América por ser las dos grandes favoritas al título y que, sin embargo, se marchan de la competición sin haber dado casi ninguna muestra de su mejor nivel. Si bien es cierto que en los cuartos de final tuvieron ocasiones de sobra para haber pasado a las semifinales, les faltó puntería y mostraron mucho menos de lo que pueden dar dado su potencial.

Vimos en Argentina a un Messi que lo intentó todo para llevar a su equipo a la victoria. Bajó muchas veces a recibir en el centro del campo (más de 10) para superar con su regate la presión rival. Pero se encontró con unos compañeros que no estaban cómodos jugando fuera de su posición (Agüero en la izquierda o Di María por el centro algo más retrasado) y que lo notaron en exceso contra un buen equipo uruguayo, que aguantó con 10 durante mucho tiempo por culpa del temerario Diego Pérez. Argentina no funcionó como pudo (y debió) haber llegado a funcionar y, aunque fue mejorando durante el torneo, esta mejora no bastó para eliminar a Uruguay. Decepción mayúscula para la anfitriona que se vio apeada de "su" Copa América, la que debía servir como antídoto ante el también decepcionante Mundial de Sudáfrica.

En Brasil también vimos a una favorita rindiendo por debajo de sus expectativas y de su potencial. Con un Ganso demasiado intermitente, un Neymar que debe mejorar en su toma de decisiones, un incisivo Robinho, un desesperante Ramires y un solitario Pato, Brasil creaba ocasiones de peligro, pero no definía con acierto. André Santos y Maicon tampoco subieron demasiado por sus bandas y crearon muy poco peligro. Brasil no fue capaz de aprovechar algunos errores de Paraguay en el primer tiempo (varios de Cáceres) y cuando lo intentó con más insistencia se encontró con un inspiradísimo Justo Villar. Lo más decepcionante, sin embargo, fue la tanda de penaltis en la que los brasileños no fueron capaces de meter ninguno de los 4 penaltis que tiraron. Tres de ellos incluso se marcharon fuera. Así es complicado ganar una tanda de penales. Seguramente se merecieron más en los 120 minutos anteriores, pero eso no es suficiente para justificar el decepcionante resultado final.

Pero Brasil y Argentina no son las únicas dos decepciones de la Copa América. También perdieron Chile y Colombia en dos partidos que pudieron haber ganado perfectamente. Eran favoritos y ambos demostraron que eran mejores que sus respectivos rivales (Venezuela y Perú), pero no consiguieron plasmarlo en el marcador. A Chile le pesó demasiado su mala primera mitad en la que fueron demasiado imprecisos e intermitentes - también por el mérito del cuadro venezolano, que lo aprovechó para adelantarse en el marcador- y a Colombia le pesó demasiado el penalti fallado por Radamel Falcao. De hecho, ambos equipos se toparon dos veces con los postes. De un modo u otro, ambos acabaron cayendo por errores de sus guardametas que no desaprovecharon sus rivales, que han demostrado que también pueden jugar a un buen nivel con sus históricas clasifiaciones para las semifinales. Ayer la Copa América nos volvió a soprender. Una vez más.

domingo, 17 de julio de 2011

El enorme mérito peruano

Ayer por la noche empezó la fase final de la Copa América, aquella en la que se decide todo. Tras depurar la competición eliminando a 4 de los 12 equipos que la empezaron, se esperaba que el nivel de la competición mejorara en la fase de las eliminatorias. Y lo hizo, aunque quizás no en la brillantez del juego, sino en la emoción. Pero lo que quiero destacar, más que las prórrogas, penaltis y clásicos del Río de la Plata, es el gran mérito que tiene la clasificación de Perú para las semifinales de la Copa América.

Colombia asumió el papel de favorito en todo momento de su partido de cuartos de final contra Perú, pero le costó demasiado encontrar huecos entre una sólida defensa peruana. Más allá de los disparos lejanos de Dayro Moreno, los movimientos de Falcao o algún intento de filtrar un buen pase de Aguilar y Guarín, a Colombia le faltó profundidad y creatividad. Le costó crear espacios y los laterales se incorporaron con menos frecuencia de la que nos tienen acostumbrados. Pese a ello, los colombianos tuvieron buenas ocasiones con dos remates al poste y un penalti fallado por Falcao y no hubiera sido nada injusto que se clasificaran para semifinales.

Por su parte, Perú aguantó bien y respondió al dominio colombiano (mayor en la primera mitad que en la segunda) creando ocasiones de gol que nacieron de jugadas de Vargas en la primera mitad y de Chiroque en la segunda. Arriba, Guerrero luchó casi en solitario con la defensa colombiana e hizo todo lo posible para poner en problemas a Perea, Yepes y Sánchez y, atrás, los defensores peruanos jugaron bien "su partido", minimizando el número de ocasiones colombianas y respondiendo a ellas sin echarse demasiado atrás. En la prórroga Perú aprovechó un error de Martínez y Yepes en una jugada a balón parada y la falta de entenimiento entre el portero Martínez y Perea para marcar las diferencias. Quizás los peruanos llegaron menos e incluso quizás tienen jugadores peores y con menos cartel que otras selecciones (incluida la colombiana), pero fueron más efectivos e incluso eficientes en su juego. Aprovecharon mejor sus recursos ante una Colombia falta de ideas, algo plana. Eso sí, a Perú no le faltó su dosis de suerte, claro.

Hay que recordar que Perú llegó a la Copa América sin varios de sus jugadores más importantes como Farfán, Pizarro, Zambrano o el Cachito Ramírez. Con todas estas bajas, una de las peores selecciones del torneo por nombres ha conseguido unos resultados magníficos, superando todas las expectativas creadas a su alrededor. Están dejando una muy buena impresión debido al gran rendimiento que le está sacando Markarkián a sus jugadores, la mayoría de ellos (14 de 23) de la liga local peruana. Contra Uruguay no van a ser favoritos, evidentemente que no. Pero van a luchar para poner en problemas a la selección de Tabárez y lo van a conseguir. Seguramente no se van a meter en la final, pero estar en semifinales no deja de tener un gran mérito. Perú no tiene nada que perder. Y el fútbol siempre está abierto a la sorpresa, ya veremos lo que pasará la noche del martes a miércoles en las semifinales...

jueves, 14 de julio de 2011

Slovenija Gre Naprej

El fútbol esloveno está progresando muchísimo en los últimos años. Su clasificación para la Eurocopa del 2000 o los Mundiales de 2002 y 2010 (con una buena actuación e Sudáfrica) así lo confirma. Además, cada vez hay más jugadores eslovenos que salen a jugar al extranjero en ligas más potentes en equipos cada vez más grandes. Si bien es cierto que todavía no hay ningún nuevo Zahovic, cada vez hay más jugadores eslovenos de calidad. Quizás Ilicic, Birsa, Matavz y Novakovic sean los que destacan más por encima de los demás.

Pero el buen nivel del fútbol esloveno - y su progreso- también se aprecia observando la liga local. Los equipos eslovenos cada vez rinden mejor en Europa y ya no son una simple cenicienta. Lo vimos el año pasado con el Maribor de Bacinovic e Ilicic, que puso en problemas al Palermo de Pastore en la Europa League, por poner un ejemplo. Este año se las tendrán que ver, supuestamente, con el Maccabi Haifa en la tercera ronda previa de la Champions League, en un partido complicado que pondrá a prueba el nivel del vigente campeón esloveno.

La liga eslovena es cada vez más atractiva. Los equipos punteros tienen a muchos jugadores interesantes, y jóvenes - el Olimpija presentó ayer un once titular contra el Bohemians con una media de edad de 23,2 años, por poner un ejemplo- y juegan un fútbol ofensivo, en partidos abiertos y bastante igualados.

En la liga eslovena hay un equipo que está por encima de todos en estos últimos años: el NK Maribor, campeón en dos de las tres últimas ediciones. Son el único equipo esloveno que ha llegado a una fase de grupos de la Champions League y son el equipo con más ligas. Ganaron la liga la pasada temporada con bastante superioridad y, pese a perder la final de la Copa eslovena y la Supercopa contra el Domzale en dos partidos muy ajustados, parece que han fichado muy bien.
Entre sus fichajes destaca Agim Ibraimi, un jugador de banda derecha que ya recuerda al Ilicic de sus primeros tiempos en el Maribor. Este zurdo juega a banda cambiada y busca siempre el disparo con su buena pierna izquierda, aprovechando una de sus mayores virtudes junto a al regate. Además de Ibraimi, el Maribor tiene otros buenos jugadores en el centro del campo como Mezga y Mejac, además de Filipovic, un excelente mediocentro de 22 años que me recuerda mucho a Busquets por su físico y su estilo de juego, y al prometedor Rajko Rep. En ataque tienen a buenos jugadores como Tavares, pichichi la temporada pasada, o los jóvenes delanteros eslovenos Beric y Velikonja, que es primo del también delantero esloveno Tim Matavz.

Después del Maribor, hay varios equipos que están un poco por debajo como son el Domzale, el Olimpija de Ljubljana, el Koper o el Gorica. El primero, el Domzale, tiene un equipo bastante interesante. Liderados por el brasileño Juninho (no es el ex-jugador del Olympique de Lyon), también tienen una base formada con varios jugadores jóvenes de interés como el delantero croata Vuk, el portero Vidmar o los defensas Zec y Apatic. Ya le ganó la final de Copa al Maribor y también la Supercopa y no hace mucho, en las temporadas 2006-07 y 2007-08, ya ganó sus dos primeras ligas eslovenas con internacionales eslovenos en sus filas como Kirm, Ljubijankic, Cimirotic o Ermin Rakovic.

Tras el Domzale, destacado segundo clasificado la temporada pasada, el Koper fue el equipo que acabó tercero en liga, un buen puesto para este irregular equipo que defendía título. Pese a rondar normalmente la parte alta de la clasificación, de vez en cuando el Koper tiene malas temporadas que le llevan a la media tabla. Ahora, dos años después de ganar el título, sólo quedan 9 de los 31 jugadores que ganaron la liga. Varios de ellos como es el caso de Rajcevic, Viler o Radujko se han ido a otros grandes eslovenos como el Maribor (los dos primeros) o el Olimpija de Ljubljana. Pese a que casi no les queda nada del equipo campeón, en el Koper hay a varios jóvenes interesantes como Aljaz Struna, Dino Stancic, Leo Stulac y Miha Blazic o a varios jugadores más conocidos e ilustres como el internacional esloveno Miran Pavlin, su sobrino Luka también juega en el Koper o el hermano de Samuel Eto'o, David Eto'o.

El cuarto clasificado la pasada temporada fue el Olimpija de Ljubljana, que completó una temporada aparentemente discreta. Pero hay que recordar que este equipo capitalino ascendió la temporada 2009-10 por primera vez a la primera división eslovena tras refundarse el año 2005 después de que las deudas obligaran al antiguo Olimpija a desaparecer. El nuevo Olimpija Ljubljana fue ascendiendo cada temporada desde la quinta división eslovena y, finalmente, ya se ha establecido en la parte alta de la primera división. Juegan competición europea (Europa League) por segunda temporada consecutiva y esta joven plantilla -con jugadores a seguir como los centrocampistas Fink, Vrsic y Lovrecic, los delanteros Valencic y Skerjanc o el joven lateran Boban Jovic - aspirará a hacer algo más que ser el cuarto en la Prva Liga.

Finalmente, el quinto equipo a destacar de esta Prva Liga eslovena es el Gorica, el segundo equipo en la clasificación histórica de la liga eslovena. Fue campeón doméstico en cuatro ocasiones, las dos últimas en las temporadas 2004-05 y 2005-06, años en los que unos jovencísimos Valter Birsa, Marko Suler y Bojan Jovic destacaban en el Gorica. Ahora, tras la marcha de jugadores importantes como Kurtic o Velikonja en enero o del juvenil Nejc Praprotnic al Atalanta en verano, no hay jugadores tan destacados en un siempre competitivo Gorica, que tendrá un difícil debut liguero en el campo del Maribor.
Pese a ello, hay muchos jóvenes a los que tendremos que seguir la pista esta temporada, como a sus defensas - todos menores de 23 años, como Boris Mijatovic, Aris Zarifovic, Nejc Mevlija -, delanteros como Plut o Kris Jogan o centrocampistas como Miha Mevlja - hermano gemelo de Nejc-, Dalibor Stojanovic o Goran Galesic. De hecho, la media de edad de la plantilla del Gorica según la web de la Prva Liga es de 22,5 años de edad. Una barbaridad para el segundo mejor equipo de la liga eslovena.

Matices finales
Esta apasionante liga eslovena empezará este mismo sábado con el Maribor-Gorica mencionado antes. Además de los 5 equipos destacados en la entrada, también la disputarán otros 5 equipos eslovenos "menosres" como son el Rudar, el Triglav, Celje, el Nafta y el Mura 05, que proviene de la segunda división eslovena y que, curiosamente, también se fundó el año 2005, como el Olimpija de Ljubljana, por las mismas razones tras la desaparición del NK Mura.
Cuando hablo del Maribor hago una referencia sobre un post de David Fernández en el blog del Humilde Aficionado para quién quiera saber algo más de Agim Ibraimi.
Además, el título del post viene de una canción que se hizo para celebrar la clasificación para la Eurocopa del año 2000, si no tengo mal entendido. El título significa literalmente "Eslovenia sigue", que es un canto con el que se anima en Eslovenia.

Benditas individualides

Ayer le costó a Brasil más de lo previsto ganar a una selección de Ecuador que no ha rendido a un gran nivel en esta Copa América. Consiguieron un punto en la primera jornada, tras un empate a cero contra Paraguay, pero luego no demostraron demasiado más para conseguir el billete para los cuartos de final. Pese a ello, Caicedo y Arroyo hicieron bastante daño a la selección brasileña sin que su equipo hiciera un gran partido y, de hecho, Ecuador consiguió meterle dos goles a Brasil.

Brasil tampoco hizo un gran partido. El marcador final fue de 4-2, pero se vieron más goles que fútbol. A la selección brasileña se le tiene que exigir más cosas, un mejor rendimiento, una mayor superioridad y una mayor velocidad en su juego. Sobre todo, esto último, además de intensidad en defensa y en la presión. Ecuador le puso en problemas en la primera mitad con muy poco, y eso es preocupante. El equipo es muy blando en defensa y deja tocar al equipo rival con demasiada comodidad, concediendo muchos espacios en el centro del campo. Eso, ante un equipo con talento en el último pase puede acabar pagándolo muy caro.

Uno de los problemas de Brasil es que le cuesta sacar el balón jugado y, como consecuencia, Ganso (también Neymar, Robinho y Pato) recibe pocos balones en condiciones. Esto es causado, en parte, por el mal rendimiento de Ramires y porque la función de Lucas Leiva es excelente a nivel defensivo y táctico, dando equilibrio al equipo, pero es demasiado lento con el balón en sus pies y siempre le sobran uno o dos toques. Eso provoca que Robinho, Ganso, Neymar y Pato aparezcan en contadas ocasiones para generar juego y den la sensación de intermitencia, de ir dejando pequeños detalles pero sin continuidad en el juego. Ante estas dificultades en la salida de balón de Brasil, ésta se realiza a través de los laterales. Y ayer, el protagonismo lo tomó Maicon.

Ante el toque excesivamente horizontal y poco acertado de los centrales brasileños y la poca capacidad de Ramires y Lucas Leiva de realizar pases que puedan superar líneas de presión, fue Maicon el que tomó mayor protagonismo con el balón. Maicon subió por la banda derecha con ímpetu y potencia ante una floja parcela defensiva de Ecuador. Era él el que subía la banda, buscaba a Robinho para combinar o tirar una pared para luego centrar. Así llegó el segundo gol de Neymar, por ejemplo. Fue un puñal por la banda derecha y aprovechó su oportunidad para sacar a Alves del equipo titular.

Hasta el momento no hemos visto la mejor versión de esta selección brasileña. Les hemos visto en apuros en una complicada fase de grupos, pero pueden dar mucho más de sí. Tienen jugadores para ello y la calidad de los cuatro cracks de la parcela ofensiva es la que tiene que aparecer de manera más continua a lo largo del partido. Brasil tiene un problema en la generación de juego que o bien se soluciona con un creador de juego, o bien con unos laterales muy activos en ataque o bien dándole un mayor ritmo a su juego, jugando con mayor intensidad. Y, de hecho, estas tres opciones no son incompatibles. Mano Menezes todavía no ha dado con la tecla exacta para sacarle el mayor rendimiento a su selección, que poco a poco va creciendo. Ayer ya empezaron a desequilibrar sus individualidades (cada vez más enchufadas), pero ahora falta un mejor funcionamiento del conjunto. Ayer vimos algunos indicios de mejora, aunque hay que ver si éstos siguen apareciendo. Pese a ello, ya están en cuartos de final y Paraguay volverá a ser su rival. Nada está fuera del alcance de estos chicos que rebosan talento. Veremos si contra Paraguay necesitan algo más que el talento que rebosan sus atacantes.

martes, 12 de julio de 2011

La noche en que Messi apareció

Esta madrugada, por fin vimos a la mejor versión de Messi con la selección argentina. Quizás no cante el himno, quizás no esté marcando goles, pero eso no significa que no pueda jugar bien. Hoy hemos visto la versión de un Leo pasador, que reparte asistencias a sus compañeros y que disfruta jugando al fútbol. Porque Messi no sólo es un jugador que marque goles (y eso que marca muchos) sino que también los genera, los crea, los imagina y los regala a sus compañeros.

Cuando Messi tiene espacios y compañeros con quién asociarse, Leo está contento, está feliz. Se dibuja una tímida sonrisa en su cara porque no tiene que basar su juego en conducciones imposibles, en slaloms maradonianos que difícilmente pueden salir bien. Alguno sí, pero no en cada partido. Cuando Messi está rodeado de buenos compañeros, las defensas tienen que estar pendientes de todos ellos. No vale meter 3 jugadores encima de Messi, porque entonces dejas al Kun o a Higuaín solos para que te creen una ocasión clara de gol. Como mucho puedes meter a dos hombres encima de Leo durante todo el partido, uno que lo marque de cerca y otro que lo vigile de reojo para cubrir los despistes del compañero, pero no puedes ponerlos a todos encima suyo.

Hoy hemos visto a una mejor selección argentina. Mejor porque Leo ha tenido comañeros con los que asociarse. Hemos visto cómo Di María jugaba en una posición bastante centrada, siendo una opción de pase. Hemos visto cómo Agüero, partiendo desde la izquierda, ha combinado con Messi e incluso, en una de estas jugadas, marcó el Kun a pase de Leo. Y hemos visto cómo Higuaín ha tenido un montón de oportunidades, buscando desmarques para crear espacios para Leo, buscando recibir en una buena posición. Al Pipita le faltó puntería, pero las ocasiones las tuvo. También vimos a un Gago más que correcto, que aportó dinamismo al juego y movió la pelota con criterio. Y vimos a una defensa argentina poco exigida, pero dando señales de que sufrirá ante mejores delanteras. Vimos a otros jugadores capaces de atraer parte de la atención de la defensa de Costa Rica y, en una segunda mitad en la que La Volpe se arriesgó demasiado, Messi no perdonó.

Messi tuvo demasiados espacios en el segundo tiempo. Ya estaba enchufado tras una buena primera mitad en la que ya entró en contacto con el balón muy a menudo, buscando agujeros en la zaga costarricense en los que meter un buen pase. Y dio más de uno y más de dos pases decisivos, dejando muy buenos detalles. Pero fue en el segundo tiempo, con la entrada de Brenes por Calvo, cuando Messi quedó libre para conducir el balón a sus anchas. Partiendo desde la derecha, pero ocupando casi siempre posiciones más centradas, Messi conducía todos los ataques y contraataques albicelestes. Así llegó su pase a Agüero en el segundo gol o su segunda asistencia a Di María en el tercero.

Hoy vimos al Leo Messi pasador. Hemos visto lo que es capaz de hacer y ahora los aficionados argentinos pueden estar algo más tranquilos. Pero esto tiene que ser una muestra para un rendimiento todavía mejor en partidos más importantes y ante equipos más importantes. Cuando Leo está bien, Argentina también está mejor. No hay que olvidar que el rival era una selección costarricense alternativa, bastante floja. Y habrá que volver a ver a Argentina contra mejores selecciones (como Colombia) que pongan en problemas a su zaga. Pero por algo se empieza y lo de hoy es un indicio de lo que nos puede hacer disfrutar el bueno de Leo. Es un jugador distinto a los demás y lo ha empezado a demostrar. ¡Qué continúe el espectáculo!

domingo, 10 de julio de 2011

El crecimiento vinotinto

Venezuela es un país que nunca ha tenido la fortuna de estar en un Mundial. En realidad, tras la clasificación de Ecuador para el Mundial de Alemania (del año 2006), es la única selección de la zona CONMEBOL que nunca ha estado en un Mundial. En la Copa América tampoco han tenido nunca demasiado éxito. Tras ser quintos en su primera participación en una Copa América, en el año 1957, no pasaron a los cuartos de final en ninguna de las ediciones posteriores hasta la más reciente, la de 2007. Por poner un ejemplo de lo que ha sido Venezuela en los últimos años, la vinotinto siempre fue undécima o duodécima entre las ediciones de 1991 y 2004, un total de 6 ediciones. Un pésimo balance para cualquier selección.

Precisamente por este pobre rendimiento, la selección venezolana es una selección de la que hasta no hace mucho se esperaba muy poco. Pero en 2007 consiguieron llegar a los cuartos de final de la Copa América (fueron primeros de grupo por delante de Uruguay, Perú y Bolivia) y en 2009 se clasificacion para el Mundial sub 20, en el que cuajaron una buena actuación llegando hasta los octavos de final en su primera participación en un Mundial de esa categoría. En esa selección estaban jugadores como Salomón Rondón o Yohandry Orozco, entonces el benjamín de esa generación con dos años menos que el resto.

Ahora, tras ganar a Ecuador por 1-0, Venezuela lidera el que posiblemente sea el grupo más complicado de esta Copa América. Un grupo en el que están Brasil y Paraguay, además de la selección ecuatoriana. Con 4 puntos, la vinotinto está muy cerca de confirmar su pase a los cuartos de final por segunda edición consecutiva, aunque antes tendrá que jugársela con Paraguay, que también necesita la victoria. De momento, Venezuela esperará que Colombia no pierda contra Bolivia para así asegurarse el pase a los cuartos de final con cuatro puntos, evitando la posibilidad de ser la peor tercera de grupo. Esta clasificación sería histórica por ser la segunda consecutiva y evidenciaría el progreso del fútbol venezolano, cada vez más competitivo en el alto nivel.

sábado, 9 de julio de 2011

Expectativas

Todas nuestras opiniones y valoraciones están determinadas por nuestras expectativas. Según lo que esperas de una cosa, te vas a sentir realizado o sorprendido si el suceso esperado se cumple o si incluso es mejorado. En cambio, se produce una decepción cuando esperamos una cosa y ésta no sucede o es peor de lo imaginado. Las expectativas diferencian también a los optimistas y a los pesimistas y sus reacciones a su carácter positivo o negativo.

Uruguay-Chile
Las expectativas puestas en el Uruguay-Chile eran bastante elevadas. Al contrario que en el Bolivia-Costa Rica - a priori el peor partido de la Copa América por nombre- que acabó resultando bastante entretenido, se esperaba bastante del partido que enfrentaba a una selección semifinalista en el pasado mundial con otra que dejó muy buenas sensaciones. Dos selecciones candidatas al título. Sin embargo, estas expectativas se rompieron y únicamente vimos los intentos de Luis Suárez - el jugador con mejores condiciones y características para destacar en la fragmentada selección urugaya-, algunas buenas paradas de Muslera, un buen Coates, un Alexis Sánchez que fue creciendo a medida que avanzaba el partido y un soberbio Valdivia.

Precisamente, Valdivia superó las expectativas creadas. Era el jugador llamado a cambiar un partido bastante aburrido. Lo hizo y en sólo 30 minutos dio todo un recital de pases, gestos técnicos y detallitos. El pase hacia Beausejour, que acaba asistiendo a Alexis Sánchez en el gol del empate de Chile, está al alcance de muy pocos futbolistas. La segunda mitad del partido fue entretenida, en partido fue digno de una Copa América, pero pudo haber sido algo más.

Perú-México
Las expectativas puestas en la selección peruana eran bastante pobres. Con las bajas de Pizarro y Farfán, dos de los mejores jugadores de esta selección, Perú estaba, a priori, en una peor situación que México para intentar ser una de las mejores terceras de grupo. Por nombres, era la peor selección del grupo. Sin embargo, han demostrado un buen nivel, consiguiendo un buen empate contra Uruguay y ganando a la selección alternativa de México, que demostró muy poca ambición. El buen rendimiento de Guerrero y de Vargas, acompañados por un equipo sólido y que no desentona está resultando clave para que el equipo peruano sume 4 puntos y esté tan cerca de los cuartos de final.

Un caso opuesto a la selección alternativa de México, cuyas expectativas eran más elevadas. Quizás por el nombre que tiene la selección mexicana o por los jugadores que llevaba, pero ahora mismo el país centroamericano está más pendiente de la selección sub 17, finalista del Mundial sub 17 que se está dispuntando en su país que no de la absoluta que juega la Copa América. El rendimiento de la selección mexicana en el partido de hoy contra Perú ha sido muy pobre, con once jugadores inconexos que iban a su aire, combinando muy poco. Sólo se salvaron Mier en la primera mitad, Pacheco en la segunda y el portero Michel, que evitó que Perú se adelantara antes en el marcador.

Nivel de la Copa América
Lo que está claro es que esta Copa América está siendo peor de lo que se esperaba. Varios partidos llamados a ser atractivos, se han quedado en menos de lo esperado. Varias de las estrellas tampoco están rindiendo a su máximo nivel y ni Argentina ni Brasil han demostrado todo su potencial. Por eso, la Copa América está resultando algo decepcionante, pues no está cumpliendo las expectativas creadas antes de que empezara el torneo. Pese a ello, ya llevamos dos días consecutivos con dos actuaciones individuales estelares (ayer Joel Campbell, hoy Valdivia).

Todavía queda mucho torneo por delante y el nivel no puede hacer nada más que mejorar.

viernes, 8 de julio de 2011

La exhibición de Campbell

Cinco días son los que separan la fecha de nacimiento de Joel Campbell con la de Neymar, que nació únicamente 5 días antes que el jugador costarricense. Precisamente esos 5 días son los que evitan que el propio Joel sea el jugador más joven de esta Copa América. Ambos son dos jugadores destacados en sus selecciones. Ambos están llamados a ser las referencias de su país y, en el caso de Neymar, se rumorea con fuerza un posible traspaso al Real Madrid.

Pese a esta comparación, mi objetivo no es comparar las virtudes de ambos futbolistas. Joel Campbell ha firmado hoy una magnífica actuación contra Bolivia, una de las mejores del torneo por su impacto. Ha jugado de maravilla, ha ido creciendo a medida que el partido avanzaba y ha vuelto loca a la floja defensa boliviana, que ha sufrido demasiado con el bueno de Joel. Si bien es cierto que abusa demasiado de su conducción, tiene buenas dotes técnicas para hacer mucho daño a las defensas rivales, regateando en carrera. Es capaz de soltar buenos pases para sus compañeros, pero a veces se precipita en sus acciones o no escoge la mejor opción. Y esta actuación es la que hace que sea el protagonista de esta entrada.

Pese a tener 19 años, Campbell no es un chico cualquiera. Ya destacó en el Mundial sub 17 de 2009 con Costa Rica y repitió en el Campeonato sub 20 de la CONCACAF disputado este mismo año, torneo en el que destacó como máximo anotador, ayudando a su selección a clasificarse para el Mundial sub 20 tras perder la final contra México.

Luego, el pasado mes de junio, también estuvo disputando la Copa de Oro en Estados Unidos con la selección absoluta. Participó en 3 de los 4 partidos que jugó su selección, saliendo siempre desde el banquillo. Llegó a marcar algún gol y a lanzar (y marcar) un penalti en la tanda de penaltis contra Honduras que acabó eliminando a Costa Rica.

Y, aunque ya había jugado con la selección absoluta en la Copa de Oro, es de los pocos que repiten en la Copa América, a la que ha acudido una selección alternativa, con muchos jugadores de menos de 22 años. Precisamente en esta selección sí que es titular y está dando muestras de su calidad en partidos como el de hoy junto a otros jugadores que también estuvieron en la Copa de Oro con menor protagonismo y con otros nuevos pertenecientes a la generación semifinalista del Mundial sub 20 de 2009.

El próximo martes, será la selección de Argentina la que tendrá que sufrir a Joel Campbell. Una defensa que no está demasiado preparada para contrarrestar a jugadores como él, rápidos, eléctricos y habilidosos. Sin embargo, la selección de Costa Rica no es sólo Campbell. También Mora, Martínez o Guzmán (sancionado de cara al próximo partido) son jugadores de bastante nivel para complicarle las cosas a Argentina, que tiene que ganar para asegurarse su pase a los cuartos de final. Si Costa Rica juega como hoy contra Bolivia, sobre todo en la segunda mitad, y Argentina no juega a un buen nivel, la albiceleste lo va a tener más complicado de lo esperado para estar en cuartos de final.

PD: Hay que mencionar también la buena primera mitad de Bolivia. Ha dejado muy buenos detalles y buenas intenciones, un fútbol de toque y que busca la portería contraria con buenos jugadores como Campos, que tiene una zurda magnífica, Arce o Gutiérrez.